Por alguna razón, parece como si este blog me inspirara a contar historias de mi pasado.
Posiblemente sea porque los temas elegidos requieren: o inventarse historias, o revelar secretos.
Y como estar de vacaciones hace que no me den ganas de inventarme historias, entonces decido revelar algunos secretos/relatos de mi humilde pero sensual persona.
Y precisamente, el tema "encerrados en el baño", me recuerda una historia:
Hace alrededor de 4 años, me encontraba en mi prepa, con varios amigos.
Ese día habían entregado boletas, así que hicimos nuestra rutina de día de boletas:
Dibujamos un pentagrama en el piso, depositamos nuestras calificaciones en el centro, y les prendimos fuego; ofreciéndole este sacrificio a los dioses de las malas calificaciones para que nos ayudaran un poco el siguiente mes.
Me temo decirles que hicimos esto durante dos años, y jamás nos funcionó.
Pero una vez que el sacrificio mensual hubo terminado, nos pusimos a discutir qué haríamos en la noche, porque era viernes, y la presión de la semana de exámenes ya había terminado.
Los requisitos para ponernos hasta el socket estaban ahí.
Lo único que faltaba era un lugar donde poder beber hasta olvidarnos de nuestras múltiples materias reprobadas.
Evidentemente, conociéndonos, ninguno de nosotros se atrevió a prestar su casa; así que empezamos a involucrar a terceros.
Después de un par de horas de búsqueda, un amigo, al que llamaremos Chavo, consiguió una casa.
Las clases terminaron, y nosotros hicimos un poco de tiempo, porque la dueña de la casa nos dijo que podía prestarla a partir de la tarde-noche.
Después de perder el tiempo en las instalaciones de la institución marista que nos albergaba, partimos hacia nuestro destino.
Lamentablemente, ninguno de nosotros sabía llegar, así que nos perdimos.
Había 9 personas metidas en un subcompacto, perdidas por la ciudad.
Eventualmente llegamos a la casa de esta mujer, pero con 3 horas de retraso, y además, todos hartos y aplastados. La convivencia se vuelve un poco tediosa cuando no tienes espacio ni para respirar holgadamente.
Evidentemente, este hastío hizo que quisiéramos ponernos ebrios más rápido; así que compramos 5 garrafas de la bebida preparatoriana por excelencia: Mezcal Tony Ayans.
Sí, de acuerdo, somos unos ñeros; pero en ese entonces el dinero escaseaba, y las ganas de beber eran demasiado grandes.
Además, lo que sea de cada quién; el mezcal es una bebida sumamente eficiente: te pone pedísimo mucho muy rápido, y en forma mucho muy económica.
Todos empezamos a beber y a convivir: pláticas, chistes, etcétera; nada fuera de lo común.
Después, uno de mis amigos puso un disco de cumbias, así que la mayoría comenzó a bailar erráticamente.
Yo no. Yo tengo demasiado estilo como para bailar.
Me senté a beber tranquilamente, cuando de repente, algo tapó la luz.
Voltée, y era una mujer EXTREMADAMENTE gorda (que, curiosamente, era la dueña de la casa).
Además, cabe mencionar que mi físico no es muy imponente: no soy grande ni fuerte, es más, ni siquiera soy robusto. Soy chaparrín y flaquito; así que no podía compararme con Gullivera, que, para acabarla de joder, era mucho más alta que yo.
En una voz sumamente varonil, me preguntó que si quería bailar.
Mis amigos, oliendo el ridículo que se avecinaba, dejaron lo que estaban haciendo y voltearon a ver qué contestaba.
"No... no gracias, no sé bailar", contesté, con una voz sumamente no-varonil.
"No importa, yo te enseño", dijo la gargantúa.
Antes de que yo pudiera responder en forma negativa, el tanque me agarró de los brazos y me jaló. Su fuerza era sobrehumana así que no pude hacer nada, más que gritar: "¡aaaaugh! ¡nooo!".
Ya era demasiado tarde. La muralla tomó mis brazos y los puso alrededor de su cintura. O lo que se llamaría cintura si ella no tuviera la forma de un tinaco.
Es más, nada más para que se den una idea de lo gorda y fea que era esta mujer, un amigo la describió mejor que yo:
"Ella no menstrúa, monstrúa"
En fin, después del baile (del que afortunadamente me pude librar pronto, diciéndole al Zeppelin que uno de mis amigos tampoco sabía bailar y quería aprender); vino el siguiente paso de toda buena peda improvisada llena de gente de 18 años:
Los juegos alcohólicos.
Después de unas cuantas rondas de caricachupes, los ánimos ya estaban caldeándose, y todos estaban en ambiente; así que pasamos al SIGUIENTE paso:
Las agarradas.
Yo no estaba suficientemente ebrio como para querer agarrarme a nadie de esa fiesta, porque, sinceramente, en ese entonces yo estaba empezando con mi novia/exnovia/novia/exnovia/novia/exnovia; y eso significa que ninguno de los dos había empezado a ponerle el cuerno al otro. Eso pasó unos meses después.
El no quererme agarrar con nadie, significó que entonces yo me volvía un espectador pasivo en un juego perverso de faje adolescente. Patético y perverso.
Empezaron los verdad o reto, seguidos por el yo nunca nunca. Honestamente, ese día me enteré de muchas cosas que me perturbaron profundamente y que no he podido borrar de mi subconsciente a pesar de que lo he intentado con todas mis fuerzas.
Para estos momentos, todos estaban pedísimos. Incluyéndome.
Y entonces, a Chavo se le ocurrió una grandiosa idea:
Juegos de intercambio de ropa.
Su plan fue tan pero tan brillante, que nadie de nosotros pudo ver que era una treta para verle los cocos a alguien.
- Fin del sarcasmo -
Obviamente, a los hombres les pareció una excelente idea (digo "les" porque yo no estaba jugando), y las mujeres estaban suficientemente ebrias como para que no les importara demasiado.
Chavo decidió que él iba primero; pero las protestas de todos los demás lo hicieron cambiar de parecer.
Los primeros fueron Tapadepluma y una mujer fea.
Se metieron al baño, y a los 5 minutos, salieron, él usando la ropa de ella y viceversa.
Pasaron otras 3 parejitas, y todas salían del baño como a los 5 minutos, con la ropa de la otra persona.
Después le tocó el turno a Chavo, que, en su pedez (o quiero pensar que así fue), eligió a una de las mujeres máaaaas feas de todo el lugar. La fea quería con él, así que ella estaba muy feliz.
Pasaron 5 minutos, 10 minutos, 20 minutos; y ellos seguían sin salir del baño.
Al principio me pareció gracioso, porque eso significaba que yo ya tenía material para burlarme de mi amigo por el resto del año escolar; pero conforme fue pasando el tiempo, dejó de parecerme jocoso, y me empezó a parecer preocupante:
Yo tenía muchas ganas de orinar.
Muchas.
Me paré afuera del baño y les grité que se apuraran, que los demás también querían jugar.
No hubo respuesta.
Pasó otra media hora, y yo ya me estaba empezando a poner muy muy nervioso.
Quise decirle algo a mis amigos, para que entre todos ejerciéramos presión social y los sacáramos del baño; pero la mitad de mis amigos ya habían caído en un estupor etílico, y la otra mitad se estaba agarrando con alguna afortunada chicuela.
Mi vejiga estaba a punto de estallar.
Yo, sumamente borracho, me tambalée hasta la puerta del baño y la empecé a golpear con intensidad.
Mis reclamos se fueron convirtiendo en súplicas; pasaron del "O sales de ahí ahorita mismo, o te parto toda tu putísima madre", al "Por favor Chavo, sal, en serio necesito orinar, por favor Chavo, por favoooooooor".
Supongo que mis súplicas fueron tan patéticas, que Chavo decidió hacer algo por mí.
¿Salió del baño?
Por supuesto que no.
Lo que sí hizo, fue gritarme "deja de estar chingando, hay un baño arriba, vete"
Feliz por esta epifanía, caminé alcohólicamente hasta las escaleras, las cuales subí muy muy lento, para no hacer ruido y no despertar a los borrachos.
El piso de arriba estaba totalmente a oscuras, así que a tientas busqué la primera puerta que pude.
Éxito, había una justo delante de mí.
La abrí silenciosamente, y prendí la luz.
"¡¿Pero qué carajo?!", fue el recibimiento que obtuve.
Aparentemente, la dueña del lugar no nos había dicho que la casa no estaba sola; sus papás seguían ahí. Durmiendo pacíficamente.
Digo, estaban durmiendo pacíficamente hasta que un borracho impertinente entró en su cuarto y prendió la luz sin previo aviso.
Lo único que se me ocurrió decir fue:
"Ay... esto no es el baño"
El papá del globo terráqueo me estaba viendo con impulsos asesinos. Y el señor era aún más grande y gordo que su hija, así que antes de que se lanzara a despedazarme, yo ofrecí una explicación no pedida:
"Sí, verá, es que me estoy meando, y pues... allá abajo hay mucho borracho, y mi amigo está encerrado en el único baño que hay, agarrándose con locura y frenesí a una tipa toda fea..."
El silencio daba miedo.
"Bueno... buenas noches señor"
En cuanto cerré la puerta del cuarto, supe que la noche estaba a punto de irse al demonio.
Bajé corriendo, me aventé abajo de una cobija y me hice el dormido.
Minutos después, el inmenso señor bajó, y en medio de la oscuridad, agarró a su hija del brazo y la llevó arriba para poder gritarle.
Chavo salió del baño (usando la ropa de la fea, por cierto), y como vió que yo seguía despierto, me preguntó:
"¿Por qué se oyen gritos?"
"Porque no me dejaste orinar, imbécil", le contesté, mientras me paraba e iba corriendo al baño.
Yo, sumamente borracho, me tambalée hasta la puerta del baño y la empecé a golpear con intensidad.
Mis reclamos se fueron convirtiendo en súplicas; pasaron del "O sales de ahí ahorita mismo, o te parto toda tu putísima madre", al "Por favor Chavo, sal, en serio necesito orinar, por favor Chavo, por favoooooooor".
Supongo que mis súplicas fueron tan patéticas, que Chavo decidió hacer algo por mí.
¿Salió del baño?
Por supuesto que no.
Lo que sí hizo, fue gritarme "deja de estar chingando, hay un baño arriba, vete"
Feliz por esta epifanía, caminé alcohólicamente hasta las escaleras, las cuales subí muy muy lento, para no hacer ruido y no despertar a los borrachos.
El piso de arriba estaba totalmente a oscuras, así que a tientas busqué la primera puerta que pude.
Éxito, había una justo delante de mí.
La abrí silenciosamente, y prendí la luz.
"¡¿Pero qué carajo?!", fue el recibimiento que obtuve.
Aparentemente, la dueña del lugar no nos había dicho que la casa no estaba sola; sus papás seguían ahí. Durmiendo pacíficamente.
Digo, estaban durmiendo pacíficamente hasta que un borracho impertinente entró en su cuarto y prendió la luz sin previo aviso.
Lo único que se me ocurrió decir fue:
"Ay... esto no es el baño"
El papá del globo terráqueo me estaba viendo con impulsos asesinos. Y el señor era aún más grande y gordo que su hija, así que antes de que se lanzara a despedazarme, yo ofrecí una explicación no pedida:
"Sí, verá, es que me estoy meando, y pues... allá abajo hay mucho borracho, y mi amigo está encerrado en el único baño que hay, agarrándose con locura y frenesí a una tipa toda fea..."
El silencio daba miedo.
"Bueno... buenas noches señor"
En cuanto cerré la puerta del cuarto, supe que la noche estaba a punto de irse al demonio.
Bajé corriendo, me aventé abajo de una cobija y me hice el dormido.
Minutos después, el inmenso señor bajó, y en medio de la oscuridad, agarró a su hija del brazo y la llevó arriba para poder gritarle.
Chavo salió del baño (usando la ropa de la fea, por cierto), y como vió que yo seguía despierto, me preguntó:
"¿Por qué se oyen gritos?"
"Porque no me dejaste orinar, imbécil", le contesté, mientras me paraba e iba corriendo al baño.
19 comentarios:
No puedo dejar de comentar, aunque también quíero tirar el agua que he bebido en la mañana, pero es que me boté de la risa en pleno relax de mi trabajo, todos me vieron y uno contestó (el que está aqui al frente de mi): De seguro es el nija ¿verdad?
Yeah! Ya te conocen hasta mis compis de trabajo!!
Me encantó tu relato/revelación/secreto/remebranza/Post para BILF
jajajaja, ayyy que conste que ESTO no es de familia.
Lenna: Yeah! Eso significa que mi fama está empezando a traspasar fronteras!
Mi sueño de ser un rockstar está un paso más cerca!
Andie: Por eso yo soy el sexy de la familia.
Jajajaja creo que yo ya habia escuchado esa historia pero sin tantos detalles jaja te juro que sin un publicas tu autobiografia te harias millonario, tienes una cantidad de historias increible!
¿Y lograste aguantarte todo ese tiempo hasta que saliera?
En GNP también tienes ya un par de fans pero no ponen comentarios.
Pues qué mala onda, los comments son los que hacen al rockstar...
Ah, es que normalmente te leen por Google Reader (de hecho, uno de ellos sólo le los posts que yo pongo como "compartidos" desde el Google Reader), porque ahí en la oficina son bien mala onda y está bloqueado blogspot... y desde google reader no se puede comentar, sólo leer.
Me acabas de hablar en algún dialecto ingenieril que no entendí...
Jajaja, recuerdo muy bien esa fiesta, recuerdo claramente los juegos de chupe y cuando fue la hora de besarse "uno por una". Debo recordar que tu suerte fue muy buena y la mia dio asco aunque pudo haber sido peor, me pudo haber tocado la suerte de chavo...
Y hay otra cosa que quisiera recordar de ese dia pero ejem... No seria correcto.
Tu bien sabes de lo que hablo. Don't You?
Sí, lo sé bien.
Pero notas lo discreto que fui para omitir las partes más vergonzosas de la noche y los nombres de las personas involucradas?
Seguro Chavo me lo agradece.
Y ahora viene el anuncio:
Google Reader es una cosa que desarrolló una pequeña compañía dedicada al internet...
Al igual que en un e-mail sacas tu cuenta; pero en vez de escribir cartitas y forwardear cadenas, para lo que sirve es que tú le dices "yo suelo leer éste y éste y este blog..." y entonces diario un duende mágico de google se mete a todos esos blogs y copia los textos y te pone todo lo que han escrito todos, acomodado en rengloncitos como si estuvieras viendo la Bandeja de entrada de tu correo.
Entonces lees lo que escribieron en los blogs sin tener que meterte a las páginas originales de los blogs.
¿Me explico?
Aparte si registras googleamigos que tengan también Reader, puedes marcar los posts que quieras como "compartidos" para que a ellos les aparezcan en una carpeta que es como "Recomendados de Jvr".
Y aparte esos "Recomendados de Jvr" aparecen en un cuadrito en mi blog, y los puedes ver aquí.
Varios de tus escritos han aparecido en los Recomendados de Jvr, como el Día de las Biblias y varias Anécdotas Canadienses, entre otros.
Ahhh, ya veo... osea, básicamente es el hijo ilegítimo de blogspot y hotmail?
Gracias a Dios mi iPhone me deja leer los blogs que quiera en donde yo quiera, porque tanta tecnología suena muy complicada...
Jajajajaja... esos juegos son traicioneros... ya hasta me da miedo jugar... pero despues de unos tragos se me olvida xD
Y... de plano me imagino que Chavo andaba hasta su ma... pq para tardarse tanto con una fea... eso o se quedo dormido en el baño y la fea abuso de el... eso de quedarse inconsciente en un baño no es lindo... luego rompen las puertas... y no...
No se quedó dormido precisamente... mal por él.
HAHAHAH... shale,,, yo nunca he ido a una fiesta así... no espera, si, pero el alcohol dejó una nube que no me permite recordar claramente... snif
Ash no, post demasiado largos deberían prohibirlos...
jajaja esos juegos nunca nunca pasan de moda!
Lorena: Esa es la belleza del alcohol, te da el alibi de la negación.
Pat: Ni modo, nadie puede prohibirme escribir tan sensualmente.
Lady Vendetta: Sí lo hacen, en cuanto pasas a universidad. Después sólo los juegas por nostalgia.
No, no es cierto... jajajaja... lo decimos por experiencia... y ademas porque a mi nunca-nunca me toco jugarlos en la prepa... buuuuu para mi!
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